La Secretaría de Industria y Comercio eliminó el control aduanero con el objetivo de bajar el costo de la burocracia y facilitar los procesos de importación.
Este martes, la Secretaría de Industria y Comercio decidió eliminar el control aduanero del etiquetado de la indumentaria y del calzado que ingresan al país. El objetivo de esta medida es bajar el costo de la burocracia y facilitar los procesos de importación.
“Los productos que se comercializan en el país deben tener una etiqueta en la que figuran los datos de la compañía y las características del producto. En el caso de los calzados y textiles, las etiquetas contienen información de los productos que son relevantes para el consumidor, pero que no abarcan atributos de seguridad”, informó la Secretaría de Industria y Comercio en un comunicado.
“La medida evita también procesos arbitrarios, burocráticos y costosos que, en algunos casos, demoran significativamente la disponibilidad de la mercadería”, agregaron desde el Gobierno.
De esta manera, a partir de la resolución 156/2024 y 159/2024 publicada en el Boletín Oficial, las empresas deberán arbitrar los medios para que los productos cuenten con el etiquetado previo a la comercialización.
“La modificación se suma a otras medidas tomadas por la Secretaría de Industria y Comercio que buscan bajar los costos de la burocracia y facilitar el comercio”, cerró el comunicado.
Las medidas tomadas para “facilitar la importación de textil y calzado”
Eliminación SIRA
Eliminación Licencias No Automáticas
Eliminación Declaración Jurada de Composición de Producto (DJCP)
Eliminación rojo aduanero obligatorio
Eliminación control aduanero
Santiago Migone, jefe de Asesores de la Secretaría de Industria y Comercio, publicó un gráfico mostrando la caída del precio relativo del textil y calzado en su cuenta de X y comentó: “Todo esto con una carga impositiva aún muy elevada tanto para la importación como para la producción. Con normas ‘fuera del radar’ (resoluciones de secretaría o aduana) el gobierno anterior generó una protección que permitió subas de precios muy por encima de los otros bienes”.
El Subsecretario de Comercio Exterior expresó «hasta hoy, los productos debían venir etiquetados desde origen y, en caso de no hacerlo, se debía iniciar un proceso de autorización ante la Secretaría llamado Adaptación al Modelo Local (AML) que generaba significativas demoras”, expresó Esteban Marzorati.
“En muchos casos, la etiqueta presentaba pequeños ‘errores’ y la mercadería debía atravesar un extenso proceso contencioso administrativo que no permitía disponer de la mercadería y aumentaba los costos de almacenamiento aduanero”, cerró.
