La droga fue encontrada en el Centro de Operaciones Policiales (COP), en la capital neuquina, por lo que tuvo que intervenir la Dirección de Antinarcóticos y tres efectivos arrojaron positivo en el control que se le realizó al personal.
Según consignó LM Neuquén, el episodio se trató de mantener puertas adentro para evitar otro escándalo, pero ya es “vox populi” en la tropa lo ocurrido en la sede de Jefatura de Policía de Lanin y Saavedra. No trascendió antes, porque apareció en escena el accidente que tuvo un agente mientras limpiaba el arma y le pegó un tiro a su compañero que permanece internado en grave estado en el hospital.
De acuerdo con lo relevado, todo ocurrió el domingo 20 de octubre alrededor de las 18 en la sala del COP, donde se reciben las llamadas de emergencia y se visualizan las cámaras de seguridad.
Allí se advirtió que había cocaína porque alguien avisó. Se disparó la alerta a los superiores que no dudaron en solicitar la presencia de la Dirección de Antinarcóticos que se encuentra en la otra ala del edificio.
Con los perros entrenados para rastrear drogas se rastrilló la sala de operaciones, algo que suena increíble, pero fue real. El animal encontró la droga y de inmediato se utilizaron reactivos que confirmaron que se trataba de cocaína. Era apenas una dosis.
Lo importante no es la cantidad, sino lo que significa por el lugar del hallazgo, la casa de la mismísima Policía.
Los jefes del COP, rápidos de reflejos, solicitaron realizar los test de consumos de drogas al personal que se encontraba en horario de trabajo y tres arrojaron positivo, dos para marihuana y uno cocaína.
En la cúpula la novedad cayó como una bomba porque son denodados los esfuerzos que se vienen realizando con las nuevas generaciones, pero la problemática social de la droga también alcanza la Policía.
Los efectivos fueron separados y puestos bajo tratamiento, la misma metodología aplicada con los cuatro agentes de la cordillera. La idea es que se recuperen y vuelvan al trabajo.
Para ello, deberán concluir el tratamiento, volver a realizar los test y pasar por una Junta Médica que verifique si están en condiciones de ejercer la función policial.