Es el primer procedimiento de ésta herramienta coronaria, realizada en centros de salud de la zona sur de la provincia. El paciente que había ingresado con múltiples fallas, evolucionó positivamente y se encuentra de alta con seguimiento médico.
En diálogo con Cadena Sur, el Dr. Luciano Saglietti, Jefe de Terapia y médico Cardiólogo de la Clínica Chapelco indicó de qué se han agudizado las enfermedades pos pandemia, por la falta de controles entre otras cosas «luego de estos tiempos donde la pandemia no nos dejaba ni a sol ni sombra, cuando no existía tiempo ni para ver, ni pensar o tratar otras patologías; vemos que aquellas enfermedades, las frecuentes, las mismas de siempre, no se han ido. Es más, han vuelto a aparecer en algunos casos con 2 años de no haber tenido controles de ningún tipo y por consiguiente más avanzadas» expreso el Dr. Saglietti.
«Pasamos inicialmente por un ilusorio período de calma, solo para ver como las patologías viejas conocidas, como la insuficiencia cardíaca, vienen más fuertes que antes. Y aquí en San Martín de los Andes, un lugar a veces olvidado por la medicina de última generación y de alta complejidad, contamos con profesionales de jerarquía, especializados, formados en centros de excelencia que están preparados para presentar lucha» indicó el doctor.
«A fines de este año se han realizado procedimientos que solo en centros especializados de alta complejidad de grandes ciudades se realizan. Ambos llevados a cabo por profesionales de la Clínica Chapelco del Servicio de la Unidad de Cuidados Intensivos y del Servicio de Cardiología» expresó Luciano.
Uno de ellos se realizó en un paciente que ingresó por una patología muy grave, con falla de múltiples órganos, uno de esos órganos fue el corazón, presentando un cuadro crítico de insuficiencia cardíaca, secundario a una infección generalizada » a dicho paciente se le colocó un catéter de Swan-Ganz. El catéter se introduce a través de una vena del cuello direccionando a través del corazón, hasta las arterias pulmonares. Este catéter, que si bien existe desde hace ya muchos años en la Argentina, nunca había sido utilizado en ningún centro de salud del sur de la provincia de Neuquén. Esto nos permitió realizar mediciones de presiones y función de determinadas partes del sistema circulatorio y con ello poder decidir específicamente el tratamiento a utilizar, cosa que sin este catéter es imposible y uno se basa en otros estudios y resultados ya no tan precisos» explicó Saglietti.
«Con la ayuda de este catéter pudimos rápidamente sacar al paciente del estado crítico, sin requerir más diálisis, la cual había requerido inicialmente, y disminuir al mínimo las dosis de medicaciones para sostén de su función cardiovascular. Tuvimos la oportunidad de utilizarlo en otro paciente, también con excelentes resultados. En este caso, un turista, al cual una infección respiratoria descompensó su enfermedad cardiaca y renal previa, y poder orientar el tratamiento con la información que nos aporta este catéter, nos permitió evitarle la diálisis y la necesidad colocarlo en un respirador. El paciente tuvo una excelente evolución y fue dado de alta, actualmente en seguimiento ambulatorio» indicó el cardiólogo.
«El otro procedimiento fue, más exactamente, la utilización de una medicación endovenosa llamada Levosimendán, que también lleva varios años circulando por los centros de excelencia en la Argentina, es una medicación que se utiliza para los casos más graves y avanzados de insuficiencia cardíaca que ya no responden a los tratamientos convencionales. La función de esta droga es aumentar la fuerza de contracción del corazón y con esto mejorar su función. Esta medicación se utiliza en estadios terminales de la enfermedad tratando de asegurarle al paciente una buena calidad de vida y en casos avanzados de la enfermedad, pero no terminales, que les de un soporte extra a la función de su corazón mientras el resto del tratamiento empiece a mostrar su efecto, que a veces no es inmediato. Lo interesante de esta poderosa medicación es que su efecto dura en el tiempo casi 15-20 días, por lo que el paciente puede seguir sintiendo el efecto beneficioso por varias semanas y permite que, en algunos casos, pueda volver a su casa y seguir con su vida habiendo mejorado sus síntomas» y agregó «otro punto a remarcar es que esta medicación se puede aplicar las veces que sea necesario hasta que su enfermedad de base mejore o se opte por otro tipo de tratamiento (cateterismo, cirugía, trasplante, etc) que, en estos casos, no queda otra opción de derivar al paciente a un centro con dicha complejidad» afirmó Luciano.
«La incorporación de esta nueva tecnología nos permite, además de darle el mejor tratamiento posible a los pacientes, poder tratar a los pacientes aquí en nuestra ciudad, cerca de sus familiares, sin necesidad de traslados, muchas veces prolongados y riesgosos» afirmó el médico y agregó «estas herramientas y tratamientos nos permiten, junto a la llegada de nuevos y experimentados profesionales a la ciudad, ofrecer una medicina de calidad a nuestros familiares y vecinos» finalizó a este diario el Dr. Luciano Saglietti.