El programa del INCAA promueve la proyección de películas argentinas en lugares que no cuentan con salas. En los últimos meses se alcanzó a 23 localidades.
Ver por primera vez una película en sitios que no cuentan con salas de cine, en los más recónditos lugares del territorio neuquino, donde los espectadores llegan puntualmente a la función caminando y hasta a caballo. Esto es posible a través del Cine Móvil, un programa del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), que el gobierno provincial implementa a través del ministerio de Desarrollo Humano, Gobiernos Locales y Mujeres.
La propuesta promueve la exhibición de películas argentinas en diferentes localidades y parajes de la provincia, llegando a lugares que no cuentan con salas de cine, a comunidades de difícil acceso y a espacios no tradicionales de exhibición. Acerca material actualizado y pensado específicamente para las diferentes comunidades con el objetivo de fomentar la diversidad cultural y fortalecer la identidad local y nacional.
«El trabajo fundamental que realiza el Cine Móvil es de verdadero puente cultural, al unir el territorio desde un alcance social verdadero, ya que llega a rincones inhóspitos donde a veces lo mediático no logra cubrir«, destacó el subsecretario de Cultura, Oscar Sarhan.
En la provincia del Neuquén, se implementa desde 1998. En 7 meses de este año se llegó a 3200 espectadores de 23 localidades (entre municipios, comisiones de fomento y parajes), con 121 funciones y más de 7000 kilómetros recorridos. Se proyectan las películas que les provee el INCAA, y también cuentan con un catálogo de producciones neuquinas.
“Es un programa creado por el INCAA, se trata de un vehículo con equipamiento para proyectar cine argentino en distintos lugares. Cada provincia tiene un Cine Móvil, en el caso de Neuquén se lleva adelante desde la subsecretaría de Cultura del ministerio de Desarrollo Humano, Gobiernos Locales y Mujeres y lo que hacemos es programar funciones en el interior provincial y en distintos lugares de Neuquén capital”, explicó cinemovilero Gustavo Zuñiga.
“Este año hemos podido realizar una mayor cantidad de funciones, nos han dado la libertad de poder programar y de llegar a distintas localidades donde hacía mucho tiempo que no íbamos”, destacó.
Zuñiga agregó que “la importancia que tiene es que es un promotor del cine nacional en lugares que de otra manera no tienen forma de acceder a las películas”. En este sentido, su compañero Guillermo Pino puso en valor “la gran capacidad que tienen las películas para transmitir emociones y acercar a las personas a historias que nos conectan con nuestra identidad y nuestra cultura”.
En la camioneta acondicionada se traslada el equipamiento necesario (tres pantallas de distintas medidas, proyectores y otros equipos), para poder adaptarlo a cada lugar que se visita, buscando que se convierta en una sala de cine por unas horas.
No sólo se busca llevar el cine a lugares donde no hay salas; donde sí las hay, posibilita además ver una película a muchos vecinos y vecinas que no pueden acceder a pagar una entrada.
El Cine Móvil llega a instituciones públicas y privadas: escuelas, salones comunitarios, salones municipales, organizaciones no gubernamentales, centros de formación profesional, hogares de ancianos-personas mayores y a todo tipo de espacio que pueda adaptarse para que sea una sala de cine. También se desarrolla un ciclo de verano con funciones al aire libre.
“En el interior, sobre todo en zonas donde hacía mucho tiempo no podíamos llegar, nos reciben muy bien, en general en todos los lugares que visitamos nos reciben con mucho entusiasmo”, explicaron los cinemovileros de la subsecretaría de Cultura, que depende de la Secretaría de Cultura, Inclusión y Gestión Comunitaria.
En lo que va del año se han proyectado películas en Paso Aguerre, Picún Leufú, Las Ovejas, Barrancas, Buta Ranquil, Coyuco Cochico, Vista Alegre, Taquimilán, El Cholar, El Huecú, Los Miches, Las Lajas, Tricao Malal, Huinganco, Andacollo, Chos Malal, Senillosa, Aluminé, Las Ovejas, Neuquén, Plottier, y los parajes Colipilli y Villa Unión. Actualmente se siguen programando funciones para poder llegar a toda la provincia.
Al territorio se llega coordinando funciones con las áreas de Cultura de los municipios y comisiones de fomento. “Tratamos de agregar al pedido de una localidad un circuito cercano para optimizar recursos y tener un mayor alcance. Por ejemplo, nos solicitan una visita de Barrancas, entonces aprovechamos para ver de ir a Buta Ranquil, Coyuco Cochico y así armamos una gira por esa región”, explicó Zuñiga.